Bienvenidos a una nueva crónica, debido a la salida que realizamos el pasado fin de semana, la ruta del agua desde Guillena a los lagos del Serrano. Esta vez se consiguió una gran participación respecto a lo habitual, ya que nos apuntamos a realizarla 6 compañeros (Juanpa, Dani, Javi, Luis, Rubén y David) mas 2 nuevas incorporaciones (Curro y Juan Pablo), los cuales solo pudieron realizar la primera parte del recorrido debido a que disponían de poco tiempo para la vuelta. Comenzamos el camino desde Guillena para desviarnos por la ruta del agua rumbo hacia la cantina. Pronto empezaron a llegar las primeras rampas y los primeros piques en las subidas, sobre todo por parte de Javi, Dani y David.
El ritmo de la marcha se incrementó notablemente, lo que hizo que llegáramos bastante pronto a la cantina. No obstante en este punto se disgregaron los 2 nuevos componentes y tomaron el camino de vuelta a Guillena, por lo ajustado del tiempo que tenían para llegar temprano a sus casas. El resto seguimos dirección hacia los Lagos del Serrano, pero el camino no sería nada fácil, ya que el desnivel se hacía notar cada vez con mas dureza, sobre todo en la conocida cuesta de los toros y otras cuestas posteriores. Este tramo sirvió para comprobar que el grupo está en gran forma, nadie quería quedar atrás y esto hizo que todos diéramos lo máximo para llegar arriba cuanto antes, alguno incluso dio mas de la cuenta (Dani) y sufrió la temida e inesperada pájara, pero se recupero posteriormente en el tramo de vuelta.
Al llegar a los lagos la gran sorpresa fue encontrarnos con un bar abierto justo donde paramos para reponer fuerzas y descansar un poco. Después del necesario descanso (con visita de la Ninfa de los lagos incluida), emprendimos el camino de vuelta, mucho mas liviano ya que lo que antes subimos ahora lo bajábamos. Aún así el ritmo de vuelta fue muy fuerte sobre todo por los continuos ataques (casi de locura) de Javi, empeñado en correr más que el viento. Hubo un conato de volver por la temible cuesta de la serpiente, rápidamente sofocado por la negativa de algunos en acometerlo, por lo que la vuelta la realizamos por el mismo camino de la ida.
En definitiva, gran etapa de todos los integrantes del grupo, 68 Km de continuas cuestas rompepiernas en unas 4 horas de ruta, gran día de ciclismo entre amigos que seguramente volvamos a repetir pronto.
¡¡Un abrazo a todos!!
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